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Médicos piden cerrar guardias por las situaciones de violencia

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26-07-2017 | GREMIALES | ROSARIO
Médicos piden cerrar guardias por las situaciones de violencia

La medida forma parte de un protocolo que el sindicato médico entregó ayer a las autoridades de Seguridad y Salud de la provincia

Los médicos proponen suspender la atención en las guardias de los hospitales cada vez que se produzca una situación de violencia que ponga en riesgo la seguridad de los profesionales y de todos los trabajadores de un centro de salud.

La medida forma parte de un protocolo que el sindicato médico presentó formalmente ayer a las autoridades de los ministerios de Seguridad y Salud de la provincia. Según advierten desde la Asociación de Médicos de la República Argentina (Amra), las situaciones de amenazas y agresiones verbales se viven "a diario" en los hospitales y centros de salud públicos, y están tan naturalizadas que ya ni se denuncian.

Con el objetivo de prevenir estos episodios, y poder trabajar con tranquilidad, los médicos presentaron ayer una serie de propuestas para regular la atención en la salud pública de la provincia.

Las medidas alcanzan al funcionamiento de los hospitales, los centros de salud y las ambulancias del Servicio de Emergencia y Traslados de la provincia y, de consensuarse, podrían alcanzar a los establecimientos municipales.

"Como sindicato venimos desde hace tiempo abordando el tema de la seguridad de los trabajadores", recordó la secretaria gremial de Amra, Sandra Maiorana.

La médica aseguró que, producto de este reclamo, en muchos centros asistenciales se realizaron reformas edilicias en las guardias, se restringió el tránsito de personas por estas áreas a un acompañante por paciente y también se incorporó seguridad privada y personal de policía.

No obstante, advirtió la profesional, "muchas veces todas estas medidas resultan insuficientes ante la violencia".

Por eso, ahora los médicos apuestan a "consensuar las medidas de seguridad que podemos tomar cuando todas las otras ya fallaron", indicó Maiorana.

Uno de los puntos más polémicos es la posibilidad de cerrar las guardias de los hospitales cada vez que se produzca un episodio que ponga en riesgo a los trabajadores. En cuanto a los servicios de ambulancias, se pedirá acompañamiento policial para cumplir con los pedidos donde pueda existir alguna situación de conflicto.

La propuesta fue elevada a las autoridades de los ministerios de Seguridad y de Salud de la provincia con la idea de consensuar un protocolo de acción que, una vez aprobado, regirá también para los centros de salud municipales.

Imposible abstraerse

"Lamentablemente, la violencia social crece, y resulta imposible que los hospitales o los médicos puedan abstraerse de eso", apuntó Maiorana, y si bien aseguró que la mayoría de los hospitales tiene custodia policial y seguridad privada, muchas veces se generan situaciones que exceden cualquier medida de prevención.

El sindicato no cuenta con un observatorio de situaciones de violencia que se desarrollan en hospitales; no obstante, mensualmente se acompaña la denuncia de un profesional que resultó víctima de "una situación de agresión grave", apuntó Maiorana.

Las agresiones leves, como maltrato, amenazas o robos, "ya son casi diarias y ni siquiera se denuncian", apuntó la gremialista.

Hace dos meses, desde el Ministerio de Salud provincial se reconoció la necesidad de elaborar nuevos protocolos de seguridad en los centros asistenciales públicos. Fue después de una seguidilla de agresiones producidas en los hospitales Cullen y Orlando Alassia, ambos de la ciudad de Santa Fe.

La tarde del 26 de mayo pasado, en el Hospital José María Cullen de la capital provincial, dos familias que tenían pacientes internados se toparon dentro del establecimiento y se trenzaron en una pelea que comenzó en la sala de guardia y que llegó, incluso, hasta casi dentro del quirófano.

Dos días después, dos pacientes menores de edad que se encontraban internados en el Hospital de Niños Orlando Alassia intentaron golpear a la jefa de guardia en el rostro, rompieron un vidrio y amenazaron al personal.

En Rosario, a principios de este mes, la madre de una nena que estaba internada en terapia intensiva del Hospital de Niños Zona Norte le arrojó un piedrazo a un enfermero que estaba en el patio del hospital y amenazó a otros profesionales con un cuchillo. Frente al hecho, los médicos decidieron suspender durante una hora la atención en la guardia.

Fuente: Sin Mordaza – La Capital

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