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Germán Lerche: “Perdón Pumas no somos capaces de abrir oportunidades y perdonar”

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Germán Lerche, hombre de fútbol, tras su paso por Colón, es una persona ligada al rugby por uno de sus hijos. El ex presidente Sabalero se manifestó tras la polémica con Pablo Matera, Guido Petti y Santiago Socino.

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A continuación, el texto de Germán Lerche

He sido dirigente de un club de fútbol con algunas otras responsabilidades en AFA.

En orden a ese pasado intentó analizar con la distancia que me aproxime a la objetividad, al juego en sí y al fenómeno social que representan los deportes masivos, convocantes y sus deportistas y; por mi apego a las Ciencias Sociales, los fenómenos y conductas que ellos generan.

En un aprendizaje constante de sus reglas de juego, he sido un inconstante seguidor del rugby.

En principio, me cautivó, uno de mis hijos quien practica desde muy chico el deporte y, desde allí, los valores arraigados en dónde la pelota pica sin rumbo.

Hijo de padre futbolero… se inició por la necesidad de practicar deporte y fue el rugby y sus compañeros, como en un scrum, quienes lo abrazaron.

El rugby le dio salud y un espacio donde forjó su personalidad y valores.

Varios años atrás, en su etapa de juvenil, escuchaba a él y sus amigos del equipo prepararse con vehemencia para jugar el clásico de la ciudad, contra los de su misma edad del otro club. Los escuchaba, con el vicio acartonado como si se tratara de hinchas de clásicos rivales de fútbol e Imaginé que iba a ser una batalla campal. Lo seguí con preocupación, les tocó ganar… Varias horas de terminado el partido y con sus ropas confundidas por el barro por esa cancha anegada, unos y otros, jugadores de clásicos rivales compartían fuera del club un buen momento, un espacio común. Los pilares que empujaban en dirección distinta, luego lo hacían en la misma que cultivaron en los valores de ese deporte.

Ahí empecé a entender que había conductas en el rugby que no los percibía en el fútbol hiper-profesional que protagonizaba.

Desde entonces acuñó el consejo que para quien no tiene condiciones innatas para el fútbol, que el mejor deporte colectivo es el rugby no sólo por sus desafíos tácticos y estratégicos sino porque forma en solidaridad y en el empuje colectivo como medio para lograr los objetivos.

Se trata de dos deportes colectivos, en uno juegan 11 y en el otro 15. Desde lo colectivo el fútbol cada vez se enfoca más en la destreza de la individualidad, reclamando cada tanto, como excepcionalidad, que los objetivos se lograrán si el grupo está fuerte. En cambio, el rugby es grupal, solidario y sus reglas hacen que el que hace el try (el goleador) no sea más importante que los otros.

El fútbol debería tomar mucho de los valores del rugby sobre todo en su etapa formativa. El proceso inclusivo del fútbol es piramidal y excluyente. Son muchos los que a su corta edad lo practican y son muy pocos los que llegan a debutar en la primera división generando un proceso de exclusión con consecuencias sociales muchas veces desgarradores. En el rugby la punta de la pirámide es mucho más ancha, se confunde con su base, quienes empezaron su proceso formativo terminan jugando en la primera e integrados a la vida social del club.

Por ello, hacemos mal en estigmatizar al rugby. Decididamente es un deporte inclusivo, formativo y solidario.

Compartía y me dolía mucho cuando a Lionel Messi se lo criticaba por no gesticular el Himno Nacional como lo hacían Los Pumas.

También me dolieron las críticas comparativas por los homenaje a Diego.
El no las hubiera analizado de las formas que otros lo hacen en su nombre.

No comparto las viejas expresiones de jugadores Pumas en sus redes sociales. Viejos y graves pecados de juventud que por madurez y responsabilidad seguro han valorado y corregido.

Más duele las críticas recibidas y las sanciones de las que fueron objeto.

Hay que contextualizar, hay que perdonar desde la docencia, acompañar con humildad, abrazar antes que soltar, desde esos lugares y conductas se construyen mejores escenarios futuros.

En el rugby no se insulta al árbitro, al rival y al propio que no ganó. Quien en el fútbol lo hace se festeja. Criticamos pecados juveniles mientras aplaudimos la jugada de Villa en Boca

Perdón Pumas no somos capaces de abrir oportunidades y perdonar.

Diego, seguro que estaría de vuestro lado para que sigan representando al rugby argentino.

Dicho desde la pelota redonda que también, por estos tiempos, pica sin rumbo.

Germán Lerche…

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