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El fiscal maltratador

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09-11-2016 | JUDICIALES | ESCÁNDALO
El fiscal maltratador

El fiscal Aldo Gerosa denunció que el Fiscal Regional de Reconquista, Eladio García, le dejaba mensajes de whatsapp diciendo: “Te voy a cagar a trompadas, sos un pelotudo, me tenés harto pedazo de pajero y te voy a seguir insultando si no hacés lo que te digo. Acá mando yo”. Las amenazas eran frecuentes para todos los fiscales.

Eladio García, Fiscal Regional de ReconquistaEladio García, Fiscal Regional de Reconquista

El fiscal de Reconquista Aldo Gerosa fue citado por la Comisión de Acuerdos integrada por senadores y diputados donde se analiza la remoción del Fiscal Regional Eladio García, acusado por el senador Raúl Gramajo por mal desempeño de sus funciones.

Durante la audiencia, la diputada provincial Inés Bertero requirió a Gerosa sobre los insultos y agravios expresados por el doctor García hacia su persona.

Gerosa manifestó: “Lo sé, porque los leí y los escuché y motivó una licencia por estrés laboral, que en realidad fue la manera que yo tenía de evitar engancharme en el clima muy tenso que existía en la Fiscalía Regional en este año. Fueron a raíz de un apartamiento en una causa, la causa Massat, referida a una cuestión económica donde los abogados defensores, o los que iban a ser los defensores de la supuesta imputada por administración fraudulenta, me piden el apartamiento ante el juez, evidente error, después como el juez lo rechazó y algunas medidas de prueba que yo había ordenado, hacen el pedido a la Fiscalía… Resulta que tiempo después, me llama la abogada que había hecho la denuncia, junto con el otro colega, que supuestamente era mi socio y me pregunta si yo había hecho algún descargo, a lo que le contesto que sí, -aclaro que yo estaba de licencia-, a lo que ella me dice que la Fiscalía Provincial no aparecía mi descargo, a lo que yo le contesto que no podía ser, que yo lo había remitido por correo electrónico a los doctores García, Salum, Mai, Martínez, a la secretaria de la Unidad Fiscal, a mi asistente letrada para que esté enterada de que yo quería seguir en la causa y al asistente letrado del doctor Martínez, para que sepa que a lo mejor seguían ellos en la causa. Luego me pregunta si le podía dar una copia, entonces le digo que si me hacía un pedido en el marco de esta investigación que ella estaba haciendo, le daría la copia como corresponde y así fue. Efectivamente, luego me entero de que esa nota mía nunca había aparecido en la Fiscalía Provincial. Esa misma abogada había denunciado a García por otra causa, y ese 28 de junio hubo una cuestión en los medios de prensa vinculada a esa segunda denuncia contra el doctor García de esta abogada, y a su vez, ella y su novio, tenían como víctimas una causa por amenazas anónimas de parte de terceros, que justo me había tocado a mí. Habíamos estado avanzando en esa investigación; teníamos identificado un posible autor que era personal policial, de la PDI, por lo tanto nos impedía avanzar rápido porque no teníamos con quien delegar la investigación. Contacté a Gendarmería e hicieron un trabajo pero esta mujer públicamente cuestionaba a García, no recuerdo los motivos; estaba esta causa de Massat primero y luego esta otro. A raíz de esto el doctor García se enoja conmigo y me hace una recriminación verbal a la cual le contesto y la cosa quedó ahí. El problema en realidad apareció al otro día: me manda un mensaje por Whatsapp “ocupate de esa causa porque si no me van a hacer tal cosa”. Yo le contesto casi en estos términos: “si en lugar de retarme te hubieras acercado a hablar conmigo sabrías que la causa está avanzada, que ya tenemos individualizado a un posible autor y estamos tratando de cercar el teléfono para poder individualizarlo”.

Iba caminando y me manda otro Whatsapp ya en términos elevados, entonces decidí no contestarle para no ponerme mal y meter la pata, dejé el teléfono. Al rato me llama Salum y me pregunta si Eladio estaba hablando conmigo, yo le pregunto por qué y me dice que desde allí se escuchan las puteadas que le estaba echando a algún fiscal. Cuando vuelvo a mi casa veo 40 y pico de mensajes de Whatsapp escritos y 4 orales en el particular mío, leí los dos o tres primeros y dije basta, porque no iba a poder dormir de la bronca. Me sentí mal. Pasados unos cuantos días los leo y realmente había expresiones subidas de tono y en los mensajes de audio había expresiones absolutamente inadecuadas referidas a mi vida particular.

El senador Gramajo lo interrumpe: “Doctor, yo voy a leer algunos textos y usted me dice si son estos: “Vos sos un pelotudo”; “me tenés harto”; “no la inventé yo, pedazo de pajero”; “te voy a seguir insultando”, “Vos sos mi subordinado”; “mi causa la tiene Busatto, mi enemigo”; “no te quiero, áspero, estúpido, así que renunciá si querés, sos prescindible”; “yo elegí insultarte”; “intolerante, autoritario, no tiene sentido el proceso democrático”, “no rompas más las bolas”; “andá a ver un psicoanalista, un psiquiatra o una pareja para coger”.

Gerosa responde: “Eso estaba en el audio, ese es lenguaje del audio. Es lo que me mandó, sí. Le decía lo de renunciar porque en una de las discusiones que tuvimos ese mismo día a la tarde, siempre por audio porque nunca me llamó, le dije que si me seguía presionando o le parecía que era tan inútil porque no puedo investigar esta causa, que me saque de la coordinación de la Unidad Fiscal de Las Toscas, que me saque del caso Díaz porque es muy complicado y del caso Bernardi, si no renuncio directamente. Por eso, luego en los mensajes que dice “renunciá a lo que quieras”.

Gramajo pregunta: “¿Todos esos textos son conscientes?”

Gerosa responde: Sí. Me tomé la molestia de escuchar los audios y leer lo que tenía escrito para recordarlos y me di cuenta que en el otro teléfono tenía muchos mensajes más y audios que no había visto ni escuchado. Eladio me dice: “mira Gerosa te voy a cagar a trompadas”. Si lo hubiese escuchado en ese momento, con la bronca que tenía nos quedábamos los dos fuera del Poder Judicial. Pasé tres meses de licencia por este estrés, pero la verdad que en ese momento fue mejor no haberlo leído. En esos momentos trabajaba en la Fiscalía hasta diez horas con mis dificultades y limitaciones, lo único que me limitaba a hacer era pedir los materiales y el personal que me faltaba porque tenía investigaciones complejas y de muchos hechos, hay una que tiene 57 hechos en el mismo legajo y son entre 19 y 20 imputados.

La diputada Alicia Gutiérrez pregunta: “¿De qué causa Díaz está hablando?”

Gerosa responde: “La causa Díaz que es la de Vera. Fue tan grande el desastre que hubo con esa causa que me mandaron a tratar de darle orden y de desarrollar esa causa en algún sentido. El planteo fue de que “soy un inútil, que no servía para nada…” y luego en esos mensajes del 28 de junio dice “que no está en discusión mi capacidad técnica”. Entonces no entendía qué quería y dije “renuncio”. Ahí fue que vino la tracalada de cosas de que soy un estúpido, un pajero y demás…

El diputado Leandro Busatto pregunta: “¿Esto es un hecho aislado, forma parte del trato cotidiano, o cómo lo califica usted?”.

Gerosa responde: “Muchas veces hubo correos electrónicos que circulan entre los tres fiscales titulares, los seis fiscales adjuntos, los tres secretarios de la Unidad Fiscal y los dos secretarios de la Unidad Regional con palabras muy subidas de tono”.

La diputada Gutiérrez pregunta: “¿Como cuáles?”

Gerosa responde: “No recuerdo, porque al comienzo los borraba y después sí los empecé a guardar porque pensé que algún día me podía tocar a mí; incluso, éste fue el primer escándalo de ese tipo, porque públicamente nos retaba continuamente, por ejemplo, en reuniones con policías, víctimas y abogados particulares, cuando uno opinaba una cosa que el no compartía, nos decía: “yo no estoy de acuerdo, callate, no sabes nada. Anda estudiar y después vení”, en público lo decía. Hubo un caso, que fue muy escandaloso, en el cual no estuve porque decidí apartarme totalmente, de un sacerdote con prisión domiciliaria. En aquel momento, hubo una reunión con los abogados querellantes, los padres de las dos víctimas y los fiscales. Esto que voy a contar me lo contó el abogado querellante, que me preguntó por qué estaba de licencia, al cual le contesté que hubo dificultades con la Fiscalía y me contó que en un momento de la reunión uno de los fiscales adjuntos expresó lo que pensaba hacer y lo destrató delante de todos y le dijo: “Sos un ignorante, callate y andá a estudiar”, delante de la madre y el padre de los nenes supuestamente víctimas y el querellante que quedó escandalizado, a tal punto que me lo cuenta sin que le pregunte. Eso sí ha pasado.

En cambio, por correo electrónico hubo expresiones más subidas de tono, y perdón las señoras: “tuviste un ataque de concha. Entonces, retrocedí. Tuve que sacártelos. Sos un permanente desagradecido”.

La diputada Gutiérrez pregunta: “Doctor, ¿nos puede dejar esos e-mails?”

Gerosa responde: “Algunos de estos e-mails no eran dirigidos a mí, puedo dejarles sólo los que refieren a mi persona. Los mensajes de Whatsapp están en los teléfonos, si quieren verlos no tengo problema y se los dejo.

El diputado Busatto pregunta: “usted considera que ¿todo esto es una situación aislada o ese trato es una situación permanente?.

Gerosa responde: “Sin duda es permanente. Aquí voy a leerles un correo electrónico. En aquel momento hubo un problema por usurpaciones en época electoral y nos envía un correo donde dice: “Están en flagrancia. Fiscal de turno comunica al fiscal jefe y éste a fiscal regional. Saca una resolución: ordeno cese de los efectos antijurídicos preparando “toda la música” y volvemos a sacar a los usurpadores. Yo firmo porque soy Garcia y tengo, aunque avejentada, una “b…” como una manada de burros machos salvajes. Hacer y ordenar ejecutar. Ahora van a tener oportunidad de conocerme. No se van a arrepentir ¿Piensan tener nietos”. Esto era una cuestión frecuente: “Sean agradecidos. Nosotros los cuidamos. Nosotros les dimos el trabajo ¿Piensan jubilarse?”. En otra oportunidad, hubo un problema en el barrio Avellaneda donde le dijo al doctor Martínez también cosas subidas de tono y al poco tiempo hubo otro problema de usurpación donde sale una nota periodística en un periódico local…

La diputada Gutiérrez preguntó: “¿El doctor De Olazabal estaba al tanto de estas situaciones?”

Gerosa responde: “No lo sé, lo puse al tanto el día que declaré por la causa en la que me apartó, que fue a principios de octubre. Le comenté estos mensajes que, si bien no le dejé copia, le dije que estaban a disposición en mi teléfono y que tenía una copia en la computadora”.

Gerosa continúa: “En mayo del año pasado, por ejemplo, nos envía el siguiente mail: “los fiscales titulares sean agradecidos, ¿capito? y dejen de creer que la tienen larga, próximo quilombo los dejo solos y en el aire les va a quedar el c…”.

“Del mismo modo, el doctor Martinez en una supuesta conversación con el intendente de Avellaneda, el cual nos habría criticado a los cuatro fiscales, termina diciendo al doctor Martínez: “siempre fuiste un pelotudo agrandado, un boludo con ínfulas… ni se te ocurra hablar con este tipo sobre estos temas, emborrachate en la pena o hace lo que se te cante el o…” Por otra parte, en relación a los fiscales adjuntos de Las Toscas: “están verdes y por ahí medio arrancados verdes”, como así también, en ocasión de una declaración del doctor Martínez en la prensa expresa: “que boludo, Rubén termina enojandosé y cantando todo chinchudo, les decían margaritas y ahora te dicen margot”…

La diputada Gutiérrez pregunta: “¿qué pasa con el personal, por ejemplo, el personal administrativo?”

Gerosa responde: “A la secretaria de la Unidad Fiscal Reconquista y de la Unidad Fiscal Las Toscas también los ha tratado con extremada virulencia por sus funciones, que hacían o no hacían, o hacían a medias. Con el personal casi no tiene relación, excepto con dos o tres que por algún motivo tiene un especial trato y que nos han causado algún inconveniente. Por ejemplo, uno de esos muchachos es de Vera que titularizó el cargo en Reconquista porque era subrogante en Vera y está a cargo del depósito de objetos secuestrados y a veces tenemos inconvenientes en encontrar las cosas, las cosas secuestradas, o no las prepara para cuando son necesarias. Hemos hecho reclamos y él va y conversa con Eladio y Eladio le dice: “No, no les hagas caso”. Y nosotros quedamos en el aire. Entonces, los que tenemos que ir a la audiencia con la escopeta o el machete o el objeto con el que mataron a alguien somos nosotros, si no los tengo y la defensa se aviva y me lo pide, perdí la audiencia y la responsabilidad es mía, no del chico del depósito ni de García, al que lo van a sancionar administrativamente es a mí.

La diputada Bertero pregunta: “que usted diga si ha efectuado algún tipo de denuncia y/o presentación por ante el Ministerio Público de la Acusación”.

Gerosa responde: “Cuando me citaron el día 4 o 5 de octubre, le dije al doctor De Olazábal, al explicarle todo esto, que las cuestiones referidas a los insultos personales y demás, de alguna manera las reservaba para mí, podría ser producto de una “calentura”; no así las expresiones relacionadas a que no habían motivos para apartarme y que se hizo por razones de humillarme y demás, porque demuestran primero que yo tenía razón, que legalmente no era susceptible de apartamiento y, en segundo lugar, que dejan en pie una jurisprudencia, que creo perniciosa para el funcionamiento de la unidad fiscal, cuando se aviven los abogados defensores a Martínez y a mí nos van a explotar en todas las causas y van a recargar el trabajo de los fiscales adjuntos y lo que debe vigilar la Fiscalía Regional es la carga de trabajo de cada fiscal, porque no puede ser que yo tenga en dos legajos 40 imputados, ¿justo me van a tocar a mí? Sí, pero no debe ser así, porque es como tener 40 causas distintas, eso nunca se corrigió y por lo tanto, mi planteo a De Olazabal era ese, le dije “mire, esto así no puede seguir”, eso sí se lo hago saber.

El senador Borla pregunta: “respecto a esa causa de apartamiento, ¿qué resolvió la Fiscalía General?”

Gerosa responde: “La Fiscalía General resolvió ratificar el apartamiento, porque yo no había hecho ninguna disconformidad. Cuando me notifican eso, es que acredito que me habían desaparecido el escrito, entonces se lo mando al fiscal por dos razones, la primera, por cubrirme la espalda porque nunca llegó, hasta que yo se le mandé personalmente al correo electrónico y luego lo llevé a la audiencia, pero me mostraron que ya lo tenían, asi que ya estaba agregado. Volviendo a las razones de por qué le mandé al fiscal el escrito, el otro motivo fue porque creía y sigo creyendo que es necesario ordenar esa Fiscalía para que, una institución que arrancó de cero con toda gente que viene de afuera del Poder Judicial, por lo tanto, no contaminada con muchos vicios del trabajo burocrático de la Justicia, mantuviera un perfil distinto y eficiente. Entonces, ahí sí el doctor De Olazabal reabre el legajo y ahora estoy a la espera de que decida qué hace. Me preguntó si yo quería reasumir la causa y le dije que en lo personal no, porque me hacen un favor sacándome ese peso de encima, pero que en lo institucional sí, porque si no quedaba un mal precedente, más ahora que me enteré de que lo que él usó como motivo de denuncia fue falta de rendiciones de cuenta y falta de depósitos de operaciones, lo cumple en el expediente sucesorio que yo había tenido a la vista cuando yo estaba y no habían cumplido, es decir, que de alguna manera la investigación que originó esta denuncia y que yo continué, fue productiva, era cierto, en parte, lo que se estaba denunciando, no sé si es delito o una mala administración económica, pero había datos fidedignos, que era que lo habíamos chequeado con mi asistente.

Fuente: SM

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