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El artista belga Tordoir reflexiona sobre el arte con una obra de 28 metros

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“El arte debe cuestionarse a sí mismo y al mundo que lo rodea y eso es justo lo que hace el barroco”, explicó Tordoir durante la presentación de su instalación

El artista belga Narcisse Tordoir presentó su última obra, 'Fake Barok' (falso barroco), una instalación de más de 28 metros que ocupa el vestíbulo del museo de Bellas Artes de Bélgica, en Bruselas, en la que reflexiona sobre la relación entre el arte, la política y la realidad.

La obra, un tríptico que estará expuesto hasta el 4 de febrero, recoge fotografías de actualidad a través de las que, empleando tópicos del arte religioso como la piedad o el sufrimiento, trata temas como el cambio climático o la crisis de refugiados.

En una de las representaciones de la piedad, Tordoir realza la imagen de unos pies sobre el agua que busca representar “la relación de Europa con los refugiados”, se inspira en “Las Meninas”, de Velázquez.

"Para el tríptico sobre las abominaciones de la guerra recurrimos a fotografías de la representación en cera de 'Los fusilamientos del 3 de mayo' de Goya que se encuentran en el Museo de Cera de Madrid", señaló el autor con respecto a las imágenes de la parte central del tríptico.

"El barroco era alegórico y retórico y experimentó una metamorfosis que reflejó el declive de la sociedad, la criticó desde el margen", prosiguió el artista, que considera que el falso barroco de su obra consigue este mismo efecto.

Con información de EFE

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