Griselda Siciliani y Adrián Suar anunciaron su separación en septiembre de 2016, después de ocho años de relación. Según declararon ellos mismos a la prensa en su momento, la ruptura fue en buenos términos y mantienen una excelente relación por su hija Margarita (cuatro).
Al poco tiempo, la actriz abandonó la casa que compartían en zona norte y se mudó a un departamento en el que recibe a sus amigos y familiares. Sin embargo, la protagonista de Sugar reconoció que no es la mejor anfitriona, sobre todo porque le faltan algunos utensilios de cocina de su hogar.
"Hace un año que vivo acá y todavía no tengo destapador", aseguró Griselda en su cuenta de Instagram junto a un video en el que se la ve abriendo una botella de cerveza con los dientes. "Por suerte, mis amigos me perdonan y se ríen conmigo", continuó la actriz en la red social en la que tiene un millón y medio de seguidores.
"Pésima anfitriona. Amigos. Familia", agregó entre los hashtags de la publicación sobre la noche libre que disfrutó antes de comenzar una nueva semana teatral con la obra que encabeza junto a Nicolás Cabré y Federico D'Elía.
"Olvido, soledad que soportar", había destacado Siciliani, el año pasado, en una pizarra que tiene colgada en una de las paredes de su nuevo departamento de soltera.
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