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A Débora Pérez Volpin la internaron porque tenía criterios de internación

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No se puede llegar a la verdad con premisas falsas. El abogado más veloz no debe sacar de cuadro a nadie de una muerte que nos llena de incertidumbres.
La medicina nos llena de incertidumbres, porque es una ciencia, pero no exacta. Nos basamos en diagnósticos presuntivos en función de protocolos médicos establecidos. Teniendo en cuenta un factor principal: nos manejamos con seres vivos, que, como la ciencia médica, no son exactos.

Todos somos sanos, hasta que estamos enfermos. Y a veces las enfermedades se manifiestan de manera furiosa. Que uno nade, corra o coma, no son parámetros de salubridad. Son muestras de voluntad, aunque se esté extremadamente enfermo.

Y en medicina, nada no tiene riesgos. Cuando escucho a colegas decir, la endoscopía es un procedimiento sin riesgo, tiemblo. Porque todo lo que hacemos para salvar una vida, connota riesgos. Pero más riesgo es no intentar salvarla.

Sé como médica que cada cosa que hace un equipo de salud para diagnosticar, tratar, salvar, tiene riesgo. Pero debemos poner en la balanza los beneficios, versus los riesgos, sobre todo en un paciente grave.

Partir de la premisa que, a alguien sano, se lo interna, es un error de concepto. Deben existir criterios médicos suficientes para la internación de alguien. Acá no vale la fama. Y si alguien te interna por "fama" se vulneran los conceptos de la buena praxis médica.

Así que vuelvo al concepto de la buena praxis, pensando a que a Débora la internaron porque tenía criterios de internación. ¿Cuáles? Según un comunicado de prensa de la Trinidad, "un cuadro de abdomen complejo".

No me queda claro el término. ¿A qué se referían con complejidad? ¿Complejo por grave? Si se sospecha de gravedad el lugar para estar internado es un lugar de máximo control. Terapia intermedia o intensiva. Y a partir de estimar la gravedad del paciente, ningún estudio es programado.

Es de Urgencia o de emergencia. Y todo procedimiento en urgencia o emergencia conlleva más riesgos. Porque el paciente es más lábil. Estamos sujetos a lo imponderable en pacientes sanos. Imagínense con un enfermo "complejo". Que salga rápido un abogado a hablar, no quiere decir que su defendido haya hecho todo bien. No saquen tan rápido de cuadro a alguno.

Tengo amigos anestesistas, trabajo con ellos, son los primeros que saben reanimar asegurando la vía aérea, tenga lo que tenga el paciente. ¿Qué me digan que un anestesista no pudo intubar? ¿Qué no tuvo otro modo de asegurar la vía aérea? ¿Qué no supo hacer diagnósticos presuntivos del porque un paciente desatura oxigeno? Sepan algo, el mejor abogado no es el que más sabe de medicina. Quiero la verdad. Justicia por Débora

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